Con este frosting podemos decorar cupcakes o incluso tartas, sólo habría que hacer un poco más de mezcla y listo. También se le pueden añadir esencias de sabores y colorantes comestibles para darle el color y el efecto que queramos.

Ingredientes:

- 150 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.

- 4 tazas de azúcar en polvo (azúcar glass).

- Una cucharadita de esencia de vainilla.

Preparación:

Batir la mantequilla unos minutos hasta que esté cremosa y un poco más pálida que su color habitual. A continuación ir agregando el azúcar poco a poco, como de media taza en media taza (cada taza tiene aproximadamente 250 ml). Hay que batir subiendo y bajando la batidora para que la mezcla se airee.

Cuando hayamos puesto todo el azúcar, echamos las gotas de esencia y batimos un poco más.

Esta mezcla dura hasta 10 días dentro de la nevera (guardada en un recipiente hermético). Cuando vayamos a utilizarla dejamos que se atempere un poco y la batimos un poco para que no esté caída y esté más esponjosa.

Si no tenemos tiempo o algún ingrediente, siempre podemos recurrir a la repostería preparada: en tiendas especializadas tienen frosting de vainilla y de chocolate listo para usar, como por ejemplo el de la marca Duncan Hines, o el de Betty Crocker...

Como todos sabéis, el Tiramisú tradicional lleva una base de bizcocho bañado en café y luego una crema echa a base de mascarpone, yema de huevo, las claras batidas a punto de nieve, etc...

Pero yo os voy a dar mi propia versión: he cambiado la base por una de galletas molidas, como la que se pone en las tartas de queso, y en vez de montar claras, he montado nata. El resultado es mucho más cremoso y consistente. Esta es mi receta:

Ingredientes:

- 1 tarrina de queso mascarpone.

- 3 yemas de huevo.

- 1 cartoncito de nata para montar (200 ml).

- 125 gr. de azúcar.

- Galletas tipo María.

- Mantequilla fundida.

- Cacao para espolvorear.

- Virutas de chocolate para decorar.

Preparación:

Lo primero es machacar las galletas hasta hacerlas polvo, si tenéis una picadora lo haréis más rápido y si no, habrá que tener paciencia con el mortero... Entonces, mezclamos las migas de galleta con la mantequilla fundida para que quede como una pasta, y lo extendemos por toda la base del molde (o sobre el fondo de unas copas, si queremos hacer la presentación individual).

A continuación, mezclamos el queso con las yemas con una espátula o cuchara de madera, removiendo bien para que ligue todo. Aparte, montamos la nata con el azúcar. Incorporamos la nata al queso despacio, con movimientos envolventes para que la nata no se nos baje mucho.

Una vez tengamos todo mezclado, lo vertemos sobre el molde, sobre las galletas, y lo repartimos bien por toda la superficie. Después espolvoreamos cacao en polvo sobre ello, con ayuda de un colador, para que quede más uniforme, y decoramos con virutas de chocolate.

Refrigeramos para que tome más consistencia y listo!

Esta fiesta que todos vemos en películas y series, donde los niños (y no tan niños) se disfrazan y van pidiendo caramelos por las casas al son de "truco o trato", se ha internacionalizado tanto que ya es imposible pasar un 31 de octubre sin pensar en celebrar una buena fiesta de disfraces. Y como en toda fiesta, no pueden faltar los aperitivos. Aquí en "Postres para todos" os proponemos algunas ideas que hemos ido recopilando por la red, aunque también podéis echarle imaginación y crear postres nuevos poniéndoles nombres tenebrosos como "brebaje de bruja" (que puede ser algún tipo de ponche o bebida con granadina, por ejemplo) o fantasmas hechos con merengue, o simples cupcakes decorados con siluetas que puedes encontrar en tiendas especializadas de repostería... todo vale con tal de pasar un rato divertido y muy dulce!!

Hacer unos bombones rellenos es un poco atareoso, pero el resultado es buenísimo. Si de repente has tenido una idea sobre unos bombones, por ejemplo, de chocolate blanco rellenos de fresa, ¿por qué no hacerlos? El sabor de los ingredientes es indiferente, ya que lo que interesa es el procedimiento.

Lo primero que tendremos que hacer es hacernos con un molde para bombones, puede ser rígido o de silicona, y que tenga alguna forma que nos guste (pirámide, redondo, alargado, forma animal...). A continuación habrá que fundir el chocolate de cobertura (en principio, con una tableta sería suficiente), y una vez fundido podemos atemperarlo como se explica en el video a continuación o verterlo directamente sobre el molde. Una vez rellenados todos los huecos, tendremos que dar golpecitos al molde contra la mesa para que las burbujas que hayan quedado en el fondo suban hacia arriba, ya que ese aire podría coger hongos y echar a perder los bombones. Una vez sacado todo el aire, volcamos el chocolate sobre el cazo donde lo habiamos fundido o sobre un bol, vaciando así el molde. Y el chocolate que haya quedado en el molde, lo metemos tal cual en la nevera para que solidifique.

Mientras, hacemos el relleno que más nos guste: limón, menta, fresa, trufa, etc. y lo introducimos en una manga pastelera. Sacamos el molde del frigorífico y con la manga vamos rellenando los huecos hasta dejar un tercio libre, ya que habrá que sellar cada bombón con el chocolate que nos sobró. Una vez sellados los bombones, volvemos a meter el molde en el frigorífico y esperamos a que endurezcan. Después, volcamos el molde sobre la mesa, golpeamos un poco y los bombones saldrán solos (o los empujamos hacia fuera si el molde es de silicona), y ya están listos para comer.

A continuación, un video explicativo donde se explica todo esto de forma que podáis verlo y entenderlo mejor:

El fin de semana pasado mi hermana me habló de una yogurtería nueva en Alcalá de Henares (recordad que soy de allí, por lo que voy a menudo), así que no podía dejar pasar la tarde sin ir a probar uno de sus helados de yogur, los cuales, puedes acompañar de distintas salsas dulces y toppings. El que yo escogí se llamaba "Vulcano" y va acompañado de granizado de naranja o sandía (a elegir), yo lo elegí de sandía (la naranja no me hace mucha gracia), y luego le echan trozos de fruta, también a elegir, yo elegí melocotón. El resultado fue exquisito, y por sólo 3,50 €, eso sí, era un vaso grande, no una tarrina pequeña. Para los que querais disfrutar de un rico helado de yogur con frutas (u otros toppings), esta heladería se encuentra en la C/Mayor y se llama "Tu Dulce Compañía". En su página de Facebook podéis ver información y fotos: link