Este año me apetecía hacer mi propio roscón de reyes casero, así que me puse a buscar los ingredientes y la receta en un libro que tengo por casa en el que escribo recetas a mano. La cantidad que os pongo aquí es como para hacer dos roscones medianos, aunque yo lo que hice fue hacer uno más pequeño (el de la foto) y otro más grande. No lo he rellenado con nada, pero ya sabéis que podéis rellenarlo de nata montada o cabello de ángel (lo venden hecho en Mercadona), e incluso podéis ponerle el juguete sorpresa!!
Ingredientes (8 raciones):
- 500 gr. de harina.
- 150 gr. de azúcar.
- La ralladura de un limón.
- La ralladura de una naranja.
- 150 ml. de leche tibia.
- Un sobre de levadura.
- 100 gr. de mantequilla reblandecida.
- 3 huevos.
- Una pizca de sal.
- 3 cucharadas de Agua de Azahar (podéis encontrarla en Ahorramás, Carrefour o en farmacias, pero preguntad en éstas que sea para repostería y no para uso tópico).
- Cerezas en almíbar para decorar (de venta en Ahorramás y Mercadona).
- Almendras fileteadas para decorar.
- Fruta escarchada para decorar (podéis conseguirla en Lidl o Mercadona).
- Azúcar para decorar.
Preparación:
Hay que hacerlo al menos con un día de antelación, porque la masa tarda en doblar su volumen unas 7 u 8 horas.
Primero empezamos mezclando el azúcar con las ralladuras de la naranja y el limón. Después disolvemos la levadura en la leche y lo mezclamos con el azúcar. Agregamos la mantequilla, 2 huevos (dejaremos el tercero para "pintar" el roscón), el agua de azahar y la pizca de sal. Lo mezclamos todo bien, si es necesario, batimos con la batidora para que no queden grumos. Añadimos la harina y mezclamos, cuidando de que no queden grumos.
Dejamos esta bola de masa en el bol tapado con un paño y lo dejamos hasta que doble su volumen (7 u 8 horas).
Cuando vayamos a darle forma, precalentamos el horno y nos echamos unas gotas de aceite en las manos para que no se nos pegue la masa mientras la moldeamos. Hacemos la forma del roscón y lo pintamos con el huevo batido que habiamos reservado. Después lo decoramos a nuestro gusto con las cerezas, la fruta escarchada y las almendras. En un cuenco ponemos el azúcar para decorar y le echamos unas gotitas de agua, lo removemos con los dedos y echamos esos grumos de azúcar por encima del roscón.
Lo metemos en el horno a 200 grados y horneamos una media hora o hasta que esté hecho por dentro (comprobarlo con un palillo). No dejéis que se tueste mucho porque si no, se queda duro.
Espero que os guste y que lo probéis ¡yo ya he disfrutado del mío!