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Con este frosting podemos decorar cupcakes o incluso tartas, sólo habría que hacer un poco más de mezcla y listo. También se le pueden añadir esencias de sabores y colorantes comestibles para darle el color y el efecto que queramos.
Ingredientes:
- 150 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
- 4 tazas de azúcar en polvo (azúcar glass).
- Una cucharadita de esencia de vainilla.
Preparación:
Batir la mantequilla unos minutos hasta que esté cremosa y un poco más pálida que su color habitual. A continuación ir agregando el azúcar poco a poco, como de media taza en media taza (cada taza tiene aproximadamente 250 ml). Hay que batir subiendo y bajando la batidora para que la mezcla se airee.
Cuando hayamos puesto todo el azúcar, echamos las gotas de esencia y batimos un poco más.
Esta mezcla dura hasta 10 días dentro de la nevera (guardada en un recipiente hermético). Cuando vayamos a utilizarla dejamos que se atempere un poco y la batimos un poco para que no esté caída y esté más esponjosa.
Si no tenemos tiempo o algún ingrediente, siempre podemos recurrir a la repostería preparada: en tiendas especializadas tienen frosting de vainilla y de chocolate listo para usar, como por ejemplo el de la marca Duncan Hines, o el de Betty Crocker...
